Aullando a la luna profesional

El post surge a raiz de la excedencia de una de las buenas-buenas profesionales con las que compartíamos guardias de coordinación, debido a que la presión familiar (y económica) ha podido a la vocación. Es un buen momento para recordar que según el estudio “Demografía médica en España. Mirando al futuro” de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) este año ya hablaba del envejecimiento de la profesión médica (lo que nos lleva a pensar en prontas jubilaciones, pero también en dificultades para hacer guardias y suplencias), y la menor disponibilidad laboral, por embarazos y maternidad activa, relacionadas con la progresiva feminización, además de la obligatoriedad de adoptar la directiva comunitaria sobre jornada laboral (que fija un tope de 48 horas semanales, guardias incluidas), configura un horizonte a corto plazo de falta de médicos. Asimismo, las irregularidades en la distribución de profesionales entre las diferentes CC.AA. son preocupantes, según la misma CESM. La risa es que ya se estén importando profesionales de especialidades concretas cuando habia (y hay) una plétora médica dispuesta a invertir tiempo (que es dinero) en formarse, y nadie ha previsto nada realmente resolutivo. El hecho es que esta importación favorece que el sistema se perpetue en la precariedad. Falta una visión global que integre, pero, ¿le interesa REALMENTE a alguien integrar, perdiendo algunos derechos adquiridos, y perdiendo otros tiempo de legislatura en tomar medidas que favorezcan al país a largo plazo, lejos de la presente legislatura? Los que aullamos a la luna seguiremos así, haciendo sonar nuestra solitaria voz para que al menos nuestra conciencia quede tranquila.

Comentarios