El Arte de la Medicina

El post de ayer me ha traído un par de impactos: el descubrimiento de mi falibilidad ortográfica como escribiente (el único factor que tenía por infalible cuando escribo: pedantería de lector precoz), y lo que es peor: la certificación de la muerte como Arte de la Medicina. Esa magia de la Medicina antigua desapareció. Los que estamos entre bambalinas sabemos que la MBE o la medicina defensiva son reacciones contra un entorno zero defects, que no pide ayuda sino soluciones inmediatas, Si lo tradicional falla, se va en busca del arca perdida de moxibustiones, limpiezas de aura y otros crecepelos milagrosos. La Medicina ya no es cosa de artistas (bueno, los del quirófano mantienen aún ese estatus) a los que se respeta y admira, ni tan solo de magos-brujos sanadores, aunque eso sí, se pidan resultados milagrosos, casi de chiste: ¿podré tocar el piano tras la operación? Siempre quise ser un gran pianista....
El médico debe justificar la presunción de culpabilidad: seguro que la cagó en algún momento, y eso (que no la patología de base, los años o la toma incontrolada de remedios y medicinas sin supervisión médica -de la dispensación libérrima de los medicamentos podríamos hablar durante años llegando a la misma conclusión que con la audiencia de la telebasura: nadie la hace, pero ahí está como una mayoría-) provocó el problema iatrogénico (sin hache, aunque quizá con i griega -Y- por el origen del palabro). Y la Medicina SÍ ha sido un arte: el arte de tratar a los enfermos como personas, no como patologías (o como fuentes de ingresos), el arte de acompañar -a pié de lecho o con soporte farmacéutico- a los pacientes en ese último viaje del que nadie se libra, el arte de dar confianza al paciente y a su familia. El Arte, señores, de estar al pié del cañón por un puñado de rupias (que no de dólares) aguantando guardias, jefes abusones, pacientes egoístas, presunto compañerismo, dificultades para asumir una estabilidad económica y sentimental digna de un artista ambulante de la postguerra. Doctores, sois los artistas del circo de la Sanidad: levantad la vista al público y saludad con una reverencia, antes que la tecnología mal entendida, los abogados malintencionados o los agitadores sociales (entre los que asoman los políticos) os manden hacer un mutis por el foro.

Comentarios

wakalani ha dicho que…
Tu estabas ahí. Estoy haciendo mi primer semestre de rotacion clínica. Sencillamente decepcionante.
Ya parece que tristemente en todos lados sucede parecido.
Anónimo ha dicho que…
Hola Dr,pincha aquí: http://mujer.terra.es/muj/padres/embarazo/vientrematerno/
Éste es el auténtico arte de la medicina.
Wakalani, no desesperes. Está en nuestra mano cambiar lo que no nos guste, ¿no somos tb parte del engranaje?
Bsos
Anónimo ha dicho que…
Naturalmente, que el concepto de arte no puede ser cerrado, aunque siempre ha tenido alguna relación con la estética.

Dr. Kruger, confundir arte con ética, o con humanismo puede ser excusable y comprensible: este es su blog. Pero lo que nunca se podrá justificar es apelar al arte, poco menos que circense, de los médicos para enfrentar la extraordinaria crisis de profesión que padecemos . Dígame qué manifestaciones artísticas son las adecuadas ante sueldos que no hacen justicia, ante guardias que no puedes librar, ante jefes abusones, ante interinidades eternas, ante políticos de todo a cien, ante la cada vez mayor dificultad para salir de tu comunidad, ante ....

Le veo muy artístico bailando sevillanas, Dr. Kruger, pero la feria de Sevilla ya ha pasado. Desgraciadamente.
Anónimo ha dicho que…
Y perdone mi pesadez, Dr. Kruger, pero la frase "El médico debe justificar la presunción de culpabilidad.." es cuanto menos equívoca.

En nuestro sistema jurídico, todavía, el médico es el presunto inocente. Es la parte contraria la que debe aportar la carga de la prueba.

Pues sólo nos faltaba eso.
Dr F ha dicho que…
Las aguas de Madagascar están turbulentas. Comentario de texto: Mi intención era apelar al Arte (en el sentido más andaluz de la palabra, si se me permite), o al duende, o a la fuerza interior, como único leiv motiv para sobrevivir a la crisis de la profesión, acosada por el entorno. La expresión "trabajar por amor al arte" refleja en sí misma el sentido de lo que pasa: llamémosle vocación traumatizada, llamémosle estado pre burn out.
Y por cierto, en nuestro sistema legal la presunción de inocencia existe, pero en nuestro imaginario colectivo el médico es siempre (con el mayordomo) el presunto culpable, y al estar asegurado (hasta que las aseguradoras quieran), el objeto de denuncia. Se ha pasado de ser Héroes a Villanos en unos pocos años. Lamento que mi estilo recargado(ante) haya podido inducir a error.
Anónimo ha dicho que…
Ninguna turbulencia. Algo decepcionado, tal vez.

La medicina, tal y como se ha entendido durante más de dos milenios en Occidente, toca a su fin. Y no nos queremos enterar.

¿Qué le exigen los tiempos que corren al médico? Que sea ¿un clínico?, ¿un investigador?, ¿un economista de la salud?, ¿un experto en humanidades?, ¿todo lo anterior?.

El médico, su profesión, la medicina están cambiando empujados por el torbellino del tiempo que vivimos. Y ante ello la respuesta que damos es la de un impreciso malestar originado en el fondo por la pérdida del antiguo modelo paternalista.

Miren que espectáculo. El día 1 de Mayo a la manifestación los médicos. Convocados por la Junta de Personal del Severo Ochoa.

Pasen, tomen asiento y miren este arte que no se pue aguantá, mi arma.
Anónimo ha dicho que…
Se ruega al administrador del blog y demás escribientes, nos dejen a los andaluces y el arte d lado. Batante tenemos con el Chaves contando chistes con la Otero. No todos los andaluces tienen gracia ¿verdad Fredi?
Anónimo ha dicho que…
En Madagascar somos muchos los inmigrantes andaluces. Podemos opinar de arte y de esa tierra. Además nunca patrimonializamos nada.

Es cierto, no todos los/as andaluces/as tienen gracia.XD

¿Verdad?
Anónimo ha dicho que…
Pues yo prefiero a un médico técnico, que sepa lo que hace, a uno que sea artista. Tras el arte lo que a veces hay es ignorancia.
Anónimo ha dicho que…
A JORge JOse.

En el hospital general de Massachusset no hay artistas, hay excelentes profesionales.

Comparto la opinión del anónimo. Todos sabemos que detrás del chascarrillo artístico a veces se esconde la incompetencia.