De un tiempo a esta parte hemos visto como los zuecos de toda la vida se han ido sustituyendo por un calzado más fashion, e incluso aparentemente más "técnico": las famosas Crocs, que ya pisan muchos hospitales, clínicas y centros de salud. Es curioso saber por Medgadget que se consideran potencialmente peligrosas en el entorno sanitario, hasta el punto de haber sido prohibidas en un hospital sueco porque la electricidad estática que acarrean provocaba interferencias en el aparataje. En el hospital de Sheffield en cambio se las prohibía por ser un portador de infecciones por la mayor dificultad de limpieza, e incluso ser un riesgo para el portador por permitir pinchazos accidentales por sus características aberturas. Y para más inri, se enganchan en las escaleras mecánicas... No creo que todo esto impida que sigan donde están, y en todo caso debería animar a la marca a sacar una línea "técnica" para sanidad, homologada para evitar este tipo de problemas que se describen (y que parecen un poco pillados por los pelos).
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